Los socios del proyecto COFRESH han participado el taller denominado ‘Cadenas de valor agroalimentarias competitivas y sostenibles: factores claves de éxito y explicaciones teóricas’, poniendo el foco en las innovaciones orientadas a la sostenibilidad (SOI por sus siglas en inglés) como elemento clave para el rediseño de las cadenas de valor agroalimentarias en la Unión Europea. Coincidiendo con los primeros meses de vida del proyecto COFRESH, el taller permitió analizar de forma pormenorizada los diferentes elementos que definen la innovación orientada a la sostenibilidad, destacando el papel de un marco normativo adecuado, la importancia de las relaciones entre los diferentes actores de la cadena de valor, los sistemas de comunicación y colaboración sólidos y dinámicos y el papel central de los consumidores como destino final de la cadena de valor agroalimentaria, cuya complejidad se enfrenta a retos sin precedentes.
Las cadenas de valor agroalimentarias juegan un papel central ante grandes retos de nuestra sociedad como el cambio climático, la degradación del medio ambiente, la salud o la transición digital y ecológica, que obligan a adoptar medidas que garanticen la sostenibilidad desde una visión integral -social, económica y medioambiental-, y este proceso pasa necesariamente por la innovación y la investigación.
Aunque la innovación ha sido considerada durante mucho tiempo como un factor que contribuye al crecimiento y la competitividad, en la actualidad el objetivo es que, cada vez más, contribuya a hacer más sostenibles los productos y procesos. Es ahí donde aparece el concepto de innovación orientada a la sostenibilidad que, en el caso del sector agroalimentario, debe ser entendida desde un enfoque multidimensional y holístico, en el que la colaboración entre todos los actores se hace imprescindible.
El proyecto CO-FRESH tiene como objetivo proporcionar técnicas, herramientas y conocimientos para hacer que las cadenas de valor agroalimentarias sean más sostenibles desde el punto de vista medioambiental, más equilibradas desde el punto de vista social y más competitivas desde el punto de vista económico. Con una duración de 42 meses (2021-2024), el proyecto cuenta con un presupuesto total de 7,5 millones de euros del programa Horizonte 2020.
Los miembros del consorcio
Entre los 26 socios que participan en el proyecto, además del CNTA, también se encuentran seis instituciones y empresas españolas más: Innogestiona Ambiental, Florette Ibérica, UNICA Group, Centre de Recerca en Economia i Desenvolupament Agroalimentari-UPC-IRTA (CREDA), Universidad de Almería, Asociación de Organizaciones de Productores de Frutas y Hortalizas de Almería (COEXPHAL).
Otros socios del proyecto son: Universidad de Hohenheim (Alemania), Tecnoalimenti SCPA (Italia), Universidad de Ghent (Bélgica), Universidad de Wageningen (Países Bajos), Universidad de Bolonia (Italia), Universidad de Ciencias de la Vida de Varsovia (Polonia), Asociación Actalia-Center of Expertise for the Food Industry (Francia), Le Terre di Zoe (Italia), Stichting Food Valley (Países Bajos), Cámara Regional de Agricultura de Países del Loira (Francia), Ekoowoc (Polonia), Pilze-Nagy Kereskedelmi es Szolgaltato KFT (Hungría), Confederación General de la Agricultura Italiana (Italia), Fruit Vegetables EUROPE(Bélgica), Kislepteku Termekeloallitok Es Szolgaltatok Orszagos Erdekkepviseletenek Egyesulete (Hungría), Comunidad Europea de Cooperativas de Consumidores (Bélgica), Cooperatives Europe asbl (Bélgica), Bieconomy Cluster (Eslovaquia), Okologiai Mezogazdasagi Kutatointezet Kozhasznu NonprofitKFT (Hungría), Enco SRL (Italia), Future Intelligence Erevna Tilepkinoniakon ke Pliroforiakon Systimaton EPE (Grecia).